Por: Francisco A. Rincón
El domingo 16 de agosto se conmemora en todo el país el día de la restauración de la República, no está demás recordarles a los hijos de la provincia Sánchez Ramírez, que los cotuisanos, cevicanos y mateños jugaron un papel estelar con su gloriosa participación en las luchas que se libraron desde el 1863 hasta 1865, para recuperar la independencia nacional proclamada en febrero de 1844.
No bien se conocen los acontecimientos de Capotillo, cuando Cotuí se pronuncia a favor de la Restauración de la República, Basilio Gavilán, Esteban Adames, Tomás Castillo y José Epifanio Márquez se encargaron de proclamar a Cotuí, luego marcharon sobre Yamaza y derrotaron a un ejército español que estaba dirigido por Eusebio Manzueta, más tarde éste se convierte en uno de los paladines de la gesta restauradora.
Pero los cotuisanos no se pararon ahí, un nutrido grupo de valientes nativos de la hoy provincia de Sánchez Ramírez, llevando en su sangre el espíritu audaz del héroe de la reconquista, se dirigió a Santiago de los caballeros, donde se libró una encarnizada batalla en la fortaleza San Luís, lo que provocó la retirada de los españoles de esa ciudad y la instalación del gobierno restaurador.
El general Gregorio Luperón fue designado comandante del ejército restaurador con asiento en la línea del Este y establece su cuartel general en Cotuí punto de partida de esta línea, luego Luperón se trasladó desde Cotuí al pie de la cordillera, como un movimiento táctico en espera del ataque que los españoles preparaban en esa región comandado por el general Pedro Santana. Ese movimiento de Luperón fue acertado puesto que ese mismo día el general Pedro Santana atacó el campamento que tenían los dominicanos en Arroyo Bermejo.
El prolífico escritor dominicano Emilio Rodríguez Demorizi, recoge en un voluminoso libro lo que él llama Papeles Pedro Francisco Bonó, donde éste cuenta su experiencia vivida en el Cuartel de Bermejo, cuando visitó este centro militar como ministro de guerra del gobierno restaurador. Pasó revista a las tropas y entre los restauradores de San Francisco de Macorís, La Vega y Monte Plata contó 56 cotuisanos y cevicanos, muchos de ellos con armas rudimentarias, solamente armados de patriotismo.
Otro cotuisano nativo de Higuerito en la actualidad Municipio de Villa La Mata, fue Francisco Suriel, dice Rufino Martínez en su Diccionario Biográfico Histórico, que este valiente soldado de la restauración fue muerto en el sitio de la plaza de Santiago en el mes de septiembre de 1863, al ser disparado el cañón que mantuvo a pulso para que otro soldado pudiera hacer puntería hacia la fortificación ocupada por los españoles.
Uno de los más distinguidos cotuisanos en la restauración fue José Epifanio Márquez, su actuación en la lucha restauradora fue brillante, pronunció a Cotuí contra la anexión y participó en el asedio del fuerte de San Luís, desempeñó funciones militares por disposición del gobierno provisorio, fue oficial de Estado Mayor del presidente Pepillo Salcedo en los campos de Este, estuvo presente en la batalla de San Pedro, pasó después al Sur como jefe de operaciones de la provincia de San Cristóbal, más tarde alcanzó el grado de general del ejército restaurador
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