BONAO.- En momentos en que la mayoría de los sectores organizados se movilizan junto a quienes generan opinión pública autorizada dejan sentir su voz en defensa del medio ambiente, dada la comprobada contaminación que generan las operaciones de la explotación minera, continúa el desplazamiento de maquinarias que harán posible el saqueo, la depredación y acentuarán la contaminación.
Desde la fase de exploración y habilitación de las nuevas instalaciones de empresa tales como la Barrick Gold, se ha incrementado el reclamo de que el Congreso Nacional y las autoridades involucradas esclarezcan los términos del contrato suscrito con la referida empresa minera canadiense que obtuvo una reasignación de parte de la consignataria original.
Hasta el momento no se evidencia beneficio alguno para la población que pueda contribuir a la reducción de la pobreza que afecta la zona, a lo que se agrega el riesgo real de contaminación de las aguas y hasta del aire que ya afectó a centenares de trabajadores en su propio entorno.
A todo esto se agrega que los empleos generados a la larga podría ser un “Caballo de Troya” ya que son centenares los obreros extranjeros, especialmente peruanos que trajo la minera en perjuicio de la mano de obra dominicana, que aún no ha tenido cabida en la empresa.
Cuidado con la Barrick Gold que podría convertir a Cotuí en un gran cementerio para los residentes de las zonas circundantes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario